lunes, 29 de noviembre de 2010

Ausente

En la ausencia de una visita anunciada,



En el cauce de un río que se ahoga,


En el suministro de aguas que invaden


Los pensamientos furtivos de un corazón


Un corazón que ya no late.


Te recuerdo en la espera del alba,


Mientras las encrucijadas de la vida ocasionan


Displicentes memorias de regresiones


Que alimentan sedientos alientos.


Recupero en la noche las displicentes restricciones


Que la vida y la sociedad han logrado dibujar


En los linderos de un libre pensamiento


Que se ve cautivo de amistades, y lazos de celo.


Renuncio ante la brigada de espíritus y fantasmas


Pues vienen a enervar la poca sangre que aún corre


Por las venas, de este corazón desdeñado


Que se ha olvidado ya de toda cualidad.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Yo no quiero amaneceres...

Y a veces llegada la noche
Aquí me quisiera quedar:
Una vez sobrellevado el día,
¿Quién querría volver a empezar?

En la ausencia de la noche
Mediante el anonimato del sueño,
Descansa el cuerpo, y en vela el celo;
Permanezco en mis ganas de no estar.

...y a veces no quiero despertar.

jueves, 18 de noviembre de 2010

La Historia de Oruguilla

Pues este cuento en desorden, incompleto, inconcluso y aún sin forma es parte de una novelilla tonta que estoy escribiendo, cuenta la historia de Mariposa, que antes de ser nada fue una fea y triste Oruguilla para terminar siendo una hermosa y sola, muy sola Mariposa. Esa noche llovía mucho y Mariposa no hacía más que acurrucarse bajo las sábanas y soñar con que todo terminaba, esa noche no podía más que esperar que llegara el alba, y con ella la esperanza que da el sol cuando ilumina el día. Ella se sentía muy sola, había tenido tiempo, quizá demasiado, y a muy temprana edad sabía cuan sola estaba, como había siempre vivido y que seguiría viviendo así. Era muy ambiguo ver como durante todo ese tiempo había estado para ella allí Árbol, siempre presente y siempre distante, cautivo de sus raíces y aún así tan grande para cobijarla con su sombra aún estando ella lejos, pero Árbol era eso, un gran tronco que podía protegerla, que quería cuidarla y guiarla, pero no era una compañía, no era un compañero, no podía jamás ser un amigo, y a veces eso parecía ser un desperdicio. En algún momento de su vida, antes de que crecieran sus alas y se llenaran de colores, Mariposa conoció a Colibrí, la más bella de las aves y esta fue su historia.


Era Julio a principios de mes, ya entrada la noche y cobijada por las estrellas y las nubes fue que se conocieron. Oruguilla estaba en compañía de las Monarca, esas mariposas que nunca se quedan en un sitio y regresan solo muy de vez en cuando, y entonces al ver pasar un grupo grande de pájaros haciendo muchos ruidos, se acercó al ver que había entre ellos aves de todas las especies, incluso todo tipo de animales. Ninguno de los individuos le prestó atención a Oruguilla, siguieron volando y platicando como si no estuviera ella allí, o como si siempre hubiera estado. Entre tanto bullicio, y tanto balbuceo ella notó a Colibrí, su aleteo tan frecuente no permitía que ella pudiera apreciar cuan bella era y cuan bellos eran su colores, pero era la más serenas de todas ellas, tenía un aire altivo y de indiferencia que en seguida intrigo a Oruguilla, la pobre creía que alguien tan seguro de sí mismo (aparentemente) sería capaz de brindarle la amistad que tanto necesitaba y mitigar así su inminente soledad.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

...¿siempre quien fue?

Van pasando las horas, y no se entiende que es lo que marca el reloj. Viene entrando en la vida la ausencia de no saber qué se extraña y qué no. Reconózcame distante, perdida, aturdida. Inmersa en el eco de mi absurda ociosidad. Aferrada caprichosamente al vacío y la banalidad de no querer aterrizar. Y es que la vida no se cimbra, hay que haber andado el camino, ha de seguirse largo y tendido hasta que las piernas se detengan y no se puedan levantar. Los senderos se pasan de corrida, y las sobras que cobijan siempre han de quedarse atrás. Sin nombre, sin rostro, identidad. No son ellas quien creemos que son, ni mucho menos aquellos que creen ser y es que...



Éste no eres tu, así como aquel no fui yo, así como Lauro nunca ha de ser aquél que cuento me ha roto el corazón, Jeremías son gritos en mi conciencia, lamentos, ideas, una creación. Un personaje que mi soledad dibujó. Ella, él, tú. Ustedes, nosotros, yo, esa, ese, aquél; ni eres tu, ni es el otro, ni soy yo. Siempre que se narran las historias no se hablan de quien se cree hablar, ni uno es quien se cree se es. Ella es yo cuando yo pudiera ser aquel, y aquél que creo fue mío podría no ser sino de él. Y él o yo, sigue siendo únicamente aquél que junto a mí una noche soñó. Pues ese que quiero no es precisamente a quien amo, y aquel al que ni amo no es ese del que pudiera yo hablar, quizá a veces ame más a quien quiero, puede ser que me atreva a creer en el amor por aquel que creo amar.







Septiembre 9 de 2010

Rara vez pudo el teclado conocer los secretos que guardaba el cuaderno.  Son pocas las veces en que el dedo recibe aquel voto de confianza que da el alma a la mano cuando esta sostiene un lápiz.
Casi nunca son las veces en el alma se enreda a una tecla en la ciega complicidad.

A pesar de asumido el riesgo de pasar del papel al monitor, no sea asume la libertad de elevar el velo y desnudar el alma ante quien es ajeno, y los miedos ante un conocido lector.
La sincronía entre pluma y mano; la acronía entre teclado y palmas.  No se puede coordinar en mega pixeles lo que la tinta ha logrado adornar.

domingo, 24 de octubre de 2010

Cuando me enteré...

... que a mi tía Cory le habían diagnosticado cáncer de mama. Antes de continuar con el relato, disculpen de antemano que dibague tanto pero lo cierto es que para poder tener una idea del impacto que tuvo esta situación en mi vida debo hacer un pequeño relato de la dinámica familiar de mi casa, de mi gente.

Yo nací en una casa, con un papá, una mamá, Librada y más tarde se vino a incorporar un hermano. Decir que ellos son mi familia sería decir una verdad a medias, toda vez que tanto mi papá como mi mamá son muy apegados a sus repectivas familias cada uno, lo que hace de mi familia un numeroso grupo de personas entre primos, vecinos, tíos, tíos abuelos, no tan tíos y arrimados. La familia de mi mamá que es la que ahora nos ocupa tiene una historia interesante, y su integración es aún más interesante. Todo empieza con Mamá Alita Saarabia, que se vió obligada a casarse con Nicolás Jauregui (viudo de su hermana Adriana y papá de sus sobrinos Nicolás y Adriana). Tuvo bastante hijos y por cuestiones que hasta la fecha me son desconocidas, se vino a vivir y sobrinos a Torreón. Una de sus hijas, Cointa; se casó con Apolo Flores. De acuerdo a las opiniones de mi abuela, y de quienes lo conocieron Apolo era todo un caballero (creo que de haberme conocido le hubiera frustrado saber que por bisnieta no tíene precisamente a una dama), educado, Licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de México, un hombre íntegro y de firmes nobles y honradas convicciones. Apolo murió unos años después de Leucemia, dejando a su esposa con 7 hijos, la mayor; su Muñeca Carito de 15 años y el menor a pocos meses después de haber cumplido el año. Como anteriormente lo dije, Apolo era un hombre de nobles y honradas convicciones, por lo que en su lecho de muerte renunció a la pensión que le correspondía a su familia con la firme idea de que "Su familia no habría de vivir a costa del estado." Lamentablemente de honestidad no se come, y la situación de su familia fue precaria tras la muerte del sostén de la familia.

Carito tuvo que abandonar la escuela justo al terminar secundaria para ayudar a su madre con los gastos de la casa y el cuidado de sus hermanos, Cointa su esposa; que había dedicado su vida al cuidado de la casa tuvo que salir de sus laureles para enfrentarse a la vida laboral y a la difícil situación de ser viuda en aquellos tiempos. Aún no sé porque pero poco tiempo después de que mi Bisa (Cointa) quedara viuda hubo una ruptura muy fuerte con varias de sus hermanas. Narro esta situación porque es a partir de aquí que yo atribuyo el imperante amalgamiento con que en mi familia nos hemos venido relacionando.

... En fin, me enteré que a mi tía Cori le habían diagnosticado cáncer, y por primera vez, esa palabra que me parecía no solo temible sino lejana vino a enfrentarseme, y la conocí tan real, que citando a mi tía hoy por hoy "El cáncer me la pela."

miércoles, 20 de octubre de 2010

¡Tócate!

Está mañana mi TL (tweet log, o time line) se vio saturado por un sin fin de tuits (tweets) celebrando y divulgando el Día Internacional contra el Cáncer de Mama. Entre las aportaciones hubo varias que me parecieron interesantes, como una tuitera que decía: "yo ya me hice el estudió (que mejor forma de celebrar o promover el día de la mujer)." La verdad es que no recuerdo exactamente como iba el texto pero está escrito en ese sentido. Hubo también quienes lograron dar un tono divertido, no faltó quien dijera "mujeres a tocarse los pechos" o "busco quien me toque los pechos, quien me auto explore."






Al estar leyendo estos tuits se vino a la cabeza dar inicio a una tarea que hace ya tiempo me propuse, y que por desidia he venido posponiendo por demasiado tiempo. Podría decirse que este "post" o esta publicación nacen a partir de tuits sugestivos e historias y vidas que convocan.





Desde mi adolescencia me enfrenté con la realidad de que la enfermedad que conocemos como Cáncer habría de ser un personaje latente en mi vida. El primer encuentro que tuve con él fue a través de la historia familiar; en una ocasión mientras indagaba en la vida de mi familia tuve conocimiento de que "Papi" (así llama mi abuela materna a su padre) había fallecido de Leucemia. En ese entonces no tuve un entendimiento real, ya había oído hablar de él, lo había escuchado nombrar en telenovelas y programas de televisión, y algo de eso habías leído en la escuela. Lo que sí sabía es que debía ser muy malo porque siempre que se le nombraba la gente ponía cara de susto, como si hubieran visto pasar un fantasma. Luego supe también que mi Bisa (mi abuela materna y las hermanas y prima de mi mamá le dicen "mami") había tenido cáncer de mama. Al poco tiempo supe también que mi Abuela había tenido cáncer en la tiroides y que por eso se la había quitado (quirúrgicamente claro está); lo anterior para enterarme luego de que no había sido cáncer y de que no hubiera habido necesidad de extraérselo si los Doctores en ese en tiempo no fueran tan drásticos en la toma de decisiones. No fue sino algunos años más tarde en que tuvimos nuestro primer encuentro frontal.


A ciencia cierta no recuerdo bien la fecha exacta, pero debía tener yo cerca de 14 años cuando me enteré...


miércoles, 22 de septiembre de 2010

Melancolía...

Según la incierta fuente "Minuto Filosófico" en Facebook, Victor Hugo en algún lado dijo "La Melancolía es la felicidad de estar triste."  Tenía mucho que no me tomaba la libertad de escribir como lo hacía antes, utilizar el espacio como un diario, un psicólogo, un terapista, un amigo.  Mis aspiraciones literarias son muchas, y quizá debería de hacer más caso de Mafalda y comenzar a volar en lugar de tomarme tanto tiempo planeando.  Sin embargo, por esta noche, dejemos de lado los planes, las aspiraciones, todo lo que se tiene trazado, y dispongámonos a escribir, y escribir mucho.  Aunque se escriba mal.  Hace ya algunos días por situaciones personales un sentimiento de soledad, y una serie de reflexiones al respecto han venido invadiendo mis días y mis noches.  Digamos que me he embriagado de soledad.


Creo que en publicaciones anteriores les he comentado de mi cuenta en la red social Twitter, y de cómo un simple Tweet logra dibujar sonrisas en mí.  Pues bien, así como genera este sentimiento de bienestar, ya que desde mi punto de vista, y creo que ya ha habido quien lo diga, twitter es un mercado abierto las 24 horas del día, sin límites de dimensiones y distancia.  Recorriendo los timeline de diferentes Twitteros, me he ido encontrando con blogs, con vidas, y con personajes interesantes que han logrado mitigar mi soledad.  Lo interesante aquí es que pese al concepto que tiene la sociedad de "soledad" y la forma en que solemos relacionar la palabra con un sentimiento de "tristeza" la soledad en mí ha tomado un nuevo significado.  Me he acercado a ella desde una perspectiva diferente.  Desde la melancolía...

Y si, el reconocerme sola, y con miedo a permanecer así ya no provoca en mi tristeza y desolación.  Si bien en determinado momento pudiera llegar a sentirme así, mi relación con mi Amiga Soledad ha cambiado tanto que hoy por hoy disfruto de esa tristeza.  Soy feliz siendo triste al sentirme sola.  Vaya que soy algo complicada.  Anteriormente me había costado mucho abrazar mi soledad por creer que si estaba así era única y exclusivamente "por mí."  Es decir que yo creía que no era ni lo suficientemente bonita, ni lo suficientemente agradable, los suficientemente simpática, lo suficientemente inteligente, lo suficientemente amiga, lo suficientemente "amable" como para que la gente a mi alrededor me aceptara y me acompañara SIEMPRE.  Hoy por hoy entiendo que ser Yo, es suficiente para cualquier cosa, entiendo que la Soledad que me ha venido embriagando no es relativa exclusivamente a mi persona, sino que es inherente a mi condición de persona, ya que por algo nacimos y morimos solas.  Entiendo que si bien aunado a mi condición de persona se suman mis virtudes y defectos que para alguna gente pudieran ser más difíciles de aceptar, eso no se traduce a mi soledad.  Ya que generalmente cuando de más gente estoy rodeada es cuando más sola me siento.  Y no obstante estoy consciente, tranquila, y feliz, de sentirme "melancólicamente sola"




jueves, 9 de septiembre de 2010

México, Creo En Tí por Ricardo López Méndez

¡México, Creo En Ti!...
Por Ricardo López Méndez
México, creo en ti,
Como en el vértice de un juramento.
Tú hueles a tragedia, tierra mía,
Y sin embargo, ríes demasiado,
A caso porque sabes que la risa
Es la envoltura de un dolor callado.
México, creo en ti,
Sin que te represente en una forma
Porque te llevo dentro, sin que sepa
Lo que tú eres en mí; pero presiento
Que mucho te pareces a mi alma
Que sé que existe pero no la veo.
México, creo en ti,
En el vuelo sutil de tus canciones
Que nacen porque sí, en la plegaria
Que yo aprendí para llamarte Patria,
Algo que es mío en mí como tu sombra
Que se tiende con vida sobre el mapa.
México, creo en ti,
En forma tal, que tienes de mi amada
La promesa y el beso que son míos.
Sin que sepa por qué se me entregaron;
No sé si por ser bueno o por ser malo,
O porque del perdón nazca el milagro.
México, creo en ti,
Sin preocuparme el oro de tu entraña;
Es bastante la vida de tu barro
Que refresca lo claro de las aguas,
En el jarro que llora por los poros,
La opresión de la carne de tu raza.
México, creo en ti,
Porque creyendo te me vuelves ansia
Y castidad y celo y esperanza.
Si yo conozco el cielo es por tu cielo,
Si conozco el dolor es por tus lágrimas
Que están en mí aprendiendo a ser lloradas.
México, creo en ti,
En tus cosechas de milagrería
Que sólo son deseo en las palabras.
Te contagias de auroras que te cantas.
¡Y todo el bosque se te vuelve carne!
¡Y todo el hombre se te vuelve selva!
México, creo en ti,
Porque escribes tu nombre con la X
Que algo tiene de cruz y de calvario:
Porque el águila brava de tu escudo
Se divierte jugando a los “volados:
Con la vida y, a veces, con la muerte.
México, creo en ti,
Como creo en los clavos que te sangran:
En las espinas que hay en tu corona,
Y en el mar que te aprieta la cintura
Para que tomes en la forma humana
Hechura de sirena en las espumas.
México, creo en ti,
Porque si no creyera que eres mío
El propio corazón me lo gritara,
Y te arrebataría con mis brazos
A todo intento de volverte ajeno,
¡Sintiendo que a mí mismo me salvaba!
México, creo en ti,
Porque eres el alto de mi marcha
Y el punto de partida de mi impulso
¡Mi credo, Patria, tiene que ser tuyo,
Como la voz que salva
Y como el ancla...!

jueves, 2 de septiembre de 2010

María

En la madrugada
durante la espera de la siguiente noche, 
María lloraba el cantar del sol.  
Ya hace tiempo las noches le eran largas.
Yacía a falta,
de que faltaran razones.
Pa no querer que llegue la noche
por temor al comienzo del alba. 
 
Pesábale la ropa que traía, 
pesole la sonrisa dibujada,
Compañía de las sombras por silueta,
se permitía también el pesar de nada.   
 
Comíanle las horas las ganas, 
dormíanse en sus sueños las ganas, 
esperando bajo el árbol siempre, 
la llegada de un no hubiera mañana.  
 
Yacía ya tarde para decir "cuando sea grande"
el reloj marcaba temprano 
en tratándose de hablar de amor.  
 
Indubitable ante el aire le caía,
sobre el semblante, la lluvia de dolor.  
 
El dolor sintiolo de tal forma,.
Pareciendo no se sintiera nada.  
 
La lluvia cayóle de madera, 
en la nada se abrazábase aquel dolor.

miércoles, 25 de agosto de 2010

Vidas en perpendicular


Vidas paralelas…
La tuya y la mía son vidas paralelas
No porque los caminos no se crucen
Sino porque nunca será mi camino
Un bache en la vida que has de recorrer.
El tuyo y el mío son mundos ajenos
Que desconocen la existencia entre sí
Pero perciben la vibra del espíritu
La manifestación del ser en uno mismo.
El lienzo que marca tu paso
Por este mundo que parece a veces estar en blanco
Lo dibuja el desliz de mi pincel
Que registra en gris cada uno de tus años.
He escuchado esta frase muchas veces, no se si tenga la impresión errónea, pero a veces creo que la gente le damos una conotación negativa, como refiriendonos a alguna faceta de la vida que es licenciosa, incógnita, ajena.  Me encanta esta frase.  Hoy tuve acceso al blog de una persona que comenzé a seguir por cuestiones bizarras.  Paseando por el increíble universo en que la red social Twitter se ha convertido para mi, tuve oportunidad de leerla.  Era una mujer que hacía un comentario sardónico y lacónico acerca de la presentación de Plutarco Haza en su bar. La verdad yo nunca he escuchado cantar al hombre y no creo que lo llegue a escuchar, pero el comentario llamó mi atención por la forma en que estuvo redactado y porque pese a lo pesado que pudiera parecer, no lo creí irrespetuoso en ningún momento. Ahora mientras escribo y tras haberla leído un poco más, entiendo como fue que empecé a seguirla y porque bizarra razón no le he dado unfollow. Por ningún motivo en específico suelo dar unfollow y refollow a las personas que suelo seguir en twitter, a veces simplemente me canso de leerlas y me doy un break. No porque lo que escriban deje de ser interesante, simplemente porque así soy yo. Recuerdo que una maestra hablaba mucho de la dualidad que habitaba en mí, raciocinio/irracionalidad, romanticismo frente a displicencia; una mujer joven llena de vida, entusiasta, inquieta, que alberga en su corazón los anhelos, sueños, y algunas costumbres de cualquier hombre melancólico de mediados de siglo XIX, por decir alguno mi paisano Manuel Acuña.
Mi signo zodiacal es cáncer, no se si tenga la menor relevancia en esta especio de pilastra, o semblanza que estoy haciendo de mi persona y de la paralela relación que creo he entablado con una persona ajena a mí en su totalidad. Yo nací dos semanas después de haber cumplido mi mamá 9 meses de embarazo. Sigo sin entender a la fecha cual fue la razón y tengo entendido que si hubo alguna que otra complicación pero nunca me había puesto ha reflexionar en la afectación que ello había tenido en mi vida hasta hace poco. Si leyeran la descripción de cualquier cáncer y me conocieran, creerían que o que leen son los resultados de un examen psicológico aplicado a mi persona. Falsa o verdaderamente, mi signo zodiacal parece explicar muchas actitudes y conductas de mi persona. ¿Pero esa dualidad que? ¿Dónde surge? No fue hasta ahora que escribo que me atrevo a pensar que viene de la mano de esa primera cita para mi nacimiento, ya que si hubiera mi mamá dado a luz cuando había estado programada, sería yo Géminis y no cáncer. En fin estas son mamadencias como diría el Dr Guillen, por lo pronto a lo que iba.
Y soñar que te sueño en el silencio

Socorriendo mis susurros y agonías

Sediento de ser en tu sendero

Saciado de secretos y

No pienses mijita…


Compartiré con ustedes un poco de la historia mía, del surgimiento de este blog, y de está manía mía de escribir…
    "No pienses mijita no pienses…" Mi mamá de broma suele repetir esa frase, honestamente no tengo cara para ofenderme… por alguna extraña razón toda mi vida he sido una persona que aparentemente piensa mucho y para acabarla de amolar, tengo una vena dramática que nomás no puedo con ella. Desde muy chica mi mamá me sentaba a leer, siempre ha considerado muy importante el hábito de la lectura y resulta que yo le agarré el gusto a eso de andar hojeando libritos y presenciar vidas ajenas. Cuando fui creciendo y conforme mi cabeza se iba llenando más y más de tonterías, me vi en la necesidad de darles salida de alguna forma… intente ir con un psicólogo pero en mi casa nunca han estado muy de acuerdo con recibir ese tipo de orientación por lo que opté por escribir. Escribía yo de todo: mis corajes, mis alegrías, mis sueños, un sinfín de cartas que nunca me atreví a enviar (muchas de ellas nunca tuvieron destinatario).
    Siguiendo la tradición familiar de cargar con complejos y traumas que no son nuestros, nunca enseñé a nadie lo que yo escribía, la única que llegó a ver alguna vez mis textos fue mi mamá cuando recogía mi cuarto. Su reacción lógicamente fue la de pedirme que los tirara, que nos los guardara, consideraba peligroso que alguien pudiera leer mis pensamientos y sentimientos, ya que podrían manipularlos y ocasionarme algún daño. Probablemente en ese entonces a ella le hubiera encantado que yo dejara de escribir, pero como en otras ocasiones mi madre tuvo que ceder ante una hija tan diferente a ella, tan libre, tan irreverente, tan natural; y nunca me prohibió escribir. Pasaron los años y hasta hace poco sube que mi mamá guardo algún texto que encontró. En fin mi acción poética era mantenida en secreto por temor a burlas, y para evitar problemas. Hasta que una vez en clase de Literatura, tuve la oportunidad de leer lo que escribía. Incluso hoy no entendiendo como fue que me atreví a hacerlo, leí una carta que había redactado al niño que me gustaba. Expuse mis sentimientos ante un salón de compañeros adolescentes, y después de haber leído la primera palabra ya estaba yo en una situación de peligro, vulnerable al rechazo, y al hostigamiento (propio de cualquier adolescente). Mientras leía yo lloraba, todavía hoy no logro entender si lloraba de miedo y angustia al darme cuenta de cuanto esta dejando ver, o al recodar que esa carta era dirigida a un niño que muy a penas notaba mi existencia y que no estaba interesado en mí. Al terminar de leer la carta mi rostro estaba empapado, y fue tal mi sorpresa al ver que de los ojos de mi auditorio escapaban alguna que otra lágrima acompañada de un aplauso. Un aplauso cuya intención no era vanagloriarme ni felicitarme, sino agradecer la confidencia que ante toda la clase había hecho.
    Mi actividad y presentaciones literarias durante ese año, se limitaron a uno que otra poema que confiaría a una amiga, y a la redacción de poemas y ensayos que vendería a diez o veinte pesos para comprar comida en la cafetería del colegio. Mi último año de Prepa, entré a una clase que tenía la distinción de ser de posición avanzada. En el curso tenía programada una extensa lectura de los clásicos de la literatura hispanoamericana acompañadas del análisis de las mismas. Sin embargo, al ser sólo cuatro los que entramos a esa clase, pudimos darle a la materia el rumbo que quisimos y le dimos un toque de taller de redacción que a mi me fascinó. El trabajo final de la materia era hacer una antología de todos los textos que hubiéramos escrito. Yo siempre había querido escribir un libro (hasta la fecha quiero hacerlo) y esta ocasión era la oportunidad perfecta. Desde aquella presentación que tuve en mi salón de literatura guarde gran parte de los poemas, cartas y ensayos que escribía. Algunos estaban escritos en hojas de cuaderno, libretas, servilletas, mensajes de texto cuando mi mamá forzosamente me apagaba la luz de la recamara, y uno que otro recibo de alguna tienda. El registro de toda mi experiencia como "escritor" estaba debidamente almacenado y resguardado en una caja, en mi tesoro. La caja es una pequeña caja de un tamaño similar al de una caja de zapatos, forrada de una tela morada, muy simple y sencilla; cualidades que la hacían aún más bella. Resguardaba en secreto el tesoro de mis pensamientos. Como siempre, unas horas antes de llegar el día de la entrega me dispuse a pasar todos mis textos a la computadora… ¡oh sorpresa! Teniendo cerca de 70 poemas, había menos de la mitad en esa caja. Una semana antes mi mamá había ordenado a la señora que ayuda en mi casa que hiciera una limpia de mi cuarto y sacara toda la basura. Mi mamá desconocía que en esa caja estaban guardados mis tesoros, la muchacha abrió la caja vio papeles y tiró a la basura las servilletas, recibos, y otros papeles que parecían cosas sin importancia. De un libro que desde hace mucho he tenido en la mente, y cuyo título sería "Mariguanadas de una mente ordinaria" en honor a la forma en que mi cerebro da vueltas una y otra vez a una misma idea encontrando siempre nuevas connotaciones un tanto filosóficas recibió el triste nombre de… "Lo que Librada no tiró"
La calificación que obtuve fue de 7, el número justo de puntos que eran el mínimo requerido para poder acreditar la materia.

Ardor compartido

 Ahora si que esto que van a leer a continuación no lo pude ni etiquetar.  No se puede calificar como un escrito, ni mucho menos con tendencias poéticas.  No tiene ni el más mínimo vestigio de de reflexión pero, ¡ah como me ardi! así que por lo pronto estas son solo palabras (aullidos sería la palabra precisa) que comparto.


Hoy no te voy a llamar
Hoy me pienso olvidar de ti
Ya no recuerdo tu nombre
Ni entiendo porqué es que te conocí
Hoy que te busque el diablo
Hoy te doy mi indiferencia
Ya no quiero saber más de ti
Ni entiendo porque ahora vienes a mí
Hoy que escribo a la bruto
Hoy que no se que decir
Ya no quiero escuchar tu nombre
Ni al mundo hablarle de ti.
Hoy que te lleve el olvido
Que sea él quien yace junto a ti
Hoy recuerdo cada noche a tu lado
Ya sé que desde entonces yo morí
Hoy con la angustia de tu ausencia
Ni idea tengo de como te perdi.

No quiero saber de ti y no es por orgullo o por coraje; hoy que el alma esta en paz, no quiero saber de ti desde el momento en que no fuiste tu de mi.  Recuerdo el hielo en tus besos, la caricia que nunca llegó, anhelo la distancia que ayer dibujaste, porque hoy, estando tan lejos has tomado la decisión de acercarte a mi.

En paralelo...

Me encanta esta frase... se usa en muchos sentidos, hay un programa de entrevistas con ese nombre, y sin embargo para mi su significado va más alla.  Probablemente me equivoque, pero tengo la impresión de que nos hemos acostumbrado a utilizar el término para referirnos a vidas, o facetas de la vida, que parecieran un poco opuestas.  Usamos la expresión para hacer alusión en veces a alguna parte licenciosa de la vida de cualquier persona, o a lo incógnito, lo secreto lo desconocido. 

Vidas paralelas... no se contrapuntéan

Yo queriendo ser cigarro

Dejaste abierta la puerta del baño 

y quise ver en tu descuido una invitacion.

No pusiste seguro,

la luz estaba prendida;

que duro es que los ojos vean 

lo que estas ganas quieren creer 

te quitaste antes el cinto

y lo dejaste de lado. 

Máss alla de ver un descuido 

aprendi a ver en ello una llamada 

a un efimero momento de comunión. 

Cada cancion que escuchas, 

cada palabra pronunciada 

me invitan a besarte, 

a acariciar tu espalda.

Tu mano tocandoTe el rostro 

la cadencia con que das vuelta a la hoja 

el cigarro que acaricia tu mano..

Y mis ganas de ser yo a quien te fumas.

De tus ojos robarme el espacio.

Buenas...

Buenas noches, quize empezar a escribir pero lo escrito carecía de todo sentido, más tarde espero tener algo decente que poder compartir, mientras tanto, saludos.

sábado, 14 de agosto de 2010

En Mis ganas de Ti


Yo q no debería procurar estos encuentros

donde las ganas mojan y la cordura seca

yo q que nunca pienso en vos

y q viéndote sueño

robarte los labios tomarlos prestados.


 

Yo que sin sentirte soy sensible a ti

a quien tus cuentos de vida

tus anécdotas, tu voz;

invitan.

A una cueva de engaños habitada por vos.


 

Voz en el eco del hoy buscas un amor

mientras que yo ardo ganas.

Alimentando estas ganas

por prudencia, recato

y recelo

se han quedado en eso, en mis ganas de ti.


 

Te veo tocar tus cuerdas cuanto quisiera

que tus manos tocaran fuera mi voz.

Cantando notas que hoy envidio

porque lo escuchado no es

tu voz en mi.

Triste noche en la que somos amigos.


 

Y yo con estas ganas que hoy de ti tengo

ganas de dar muerte a mi conciencia

dar vida a lo escondido

ganas de ti.

Que ganas de beberte en mi taza café.


 

Si compartiera con alguien lo escondido

el sentimiento viviría a mis obscuras.

Pensamientos que quizá conocidos

podrían

Estas ganas consumir.


 

Yo no debería procurar estos encuentros

En que sigues ganando la partida

Y estas ganas que se quedan

Solo en eso:

Éstas ganas cada vez que tu ganas.

lunes, 19 de julio de 2010

Juégame que quiero jugar contigo.

Ahora tras la muerte de Benedetti he tratado de acercarme más a él, se puede decir que a través de su poesía, me encantaría decir que es a través de la mía.  No se equivoquen, mis pocos y estimados lectores, no es que escriba yo como él, ni que me quiera comparar, sino que a estas alturas de mi vida, en esta circunstancia de tiempo y espacio, es Ese Hombre, el que me ha inspirado, ha yo también hacer un trato.

Yo quiero hacer un trato contigo
te propongo mejor que juguemos
finjamos que somos amigos
y que tu y yo no nos queremos.
En las noches que llegas cansado
yo soñare que llegas conmigo
y en el más absurdo de los silencios
fingiré también que hablo contigo.
Yo haré como que te quiero
tu pretende que soy tu cariño
permiteme vivir este juego
el más absurdo el más patético y el más lindo,
permiteme alimentar este juego
en el más discreto de los silencios
en el más absurdo de los sueños.
 Aunque llegue a ser;
tal vez no hoy, tal vez mañana,
aunque llegue a ser;
el más amargo arrepentimiento.
Déjame jugar contigo,
y seguir adelante con esta farsa
finge que crees que me quieres
mientras yo pretendo creer que lo crees
sigamos juntos este camino
mientras la vida dibuja un futuro mejor
juguemos, y dejémonos luego en el olvido
y más adelante, sin querernos, sin odiarnos
sigamos pretendiendo que somos amigos
que entre nosotros nunca nada paso
y que este juego tan absurdo que vivimos
nunca, en esta vida, existió

domingo, 18 de julio de 2010

Me gusta como me gustas.

Me gusta quererle como le quiero, y
me gusta que me quieras porque al parecer... no nos queremos,
me gusta que el me quiera,
por que en su cariño no hay motivos, pretensiones, intensiones,
me gusta que le quiero sin que haya explicación.
Por ser el nadie, y porque para el yo soy nadie.
Me gusta que yo te cuento,
y me escuchas como nadie, me gusta que cuando me cuenta,
siento que me dice lo que solo le dice a nadie.
Me gusta que me quiera por quien no soy,
por lo que no tengo,
me gusta quererle por quien creo que el es,
y lo que al verlo siento.
Me gusta que sea mi compañero en las noches de desvelo,
y que teniendolo tan cerca,
aún estando tan lejos, sea el en mi solo un recuerdo,
más nunca deja de ser mi compañero.
Me gusta que esa aunsencia vaya alimentado su presencia,
que en mi vida sea un amigo, un confidente,
un rival, un colega,
le quiero porque somos nada,
me quiere por lo que soy yo en él.



martes, 6 de julio de 2010

Second of my own...

De antemano una reiterara, repetida, y sincera disculpa a los que me leen. A los que no, Felicidades hacen bien.

Most of time it may appear i’ve been gone
I seem distant, careless
It appears as if I where not interested at all
Believe me honey, it is never true
I’m just lost for a couple minutes
Standing for a while in a lonely wrong place
Sometimes I rather hide from you
Than showing up to stand the truth:
I care too much about everyone
About you
I’m hunted and scared to realize I could lose
Your heart, your strength, your company
Your trust, that all my wrong may win after all
And take you apart while I’m loving you the most

lunes, 14 de junio de 2010

11: once regala2

De los versos que te mando en un beso = 11 + g = 11

Un te amo que tu noche me robó = 10 + a= 11

Silencios, que en tu ausencia hacen eco = 11 + g = 11

Fiel locura sometida en tu fervor = 11 + g = 11


Recogí en la mañana de tu cielo = 11 + g = 11

La nube ciega que el pasto escupió. = 10 + a = 11

Pinchó mi mano una rosa altanera; = 11 + g = 11

Seda roja derramó. ¡Zalamera! = 11 + g = 11


Otro beso dibujé y no di cuenta = 11 + g = 11

Era de ella mi tuyo corazón = 10 + a = 11

Y mi llanto abracé dándome vuelta = 11 + g = 11

sábado, 5 de junio de 2010

Disculpa…

A ti querido lector, que seguro eres alguien que me conoce, me estima, y que no necesariamente sabe mucho de literatura, te pido una disculpa. Hace unos días regrese a los pasillos dónde para bien o para mal me alentaron a escribir, y me di cuenta que mis más recientes creaciones, antes de representar orgullo deberían darme lástima. Me he convertido en una seudo-escritora ya que me pongo a divagar mezclando un montón de palabras bonitas, aparentando poner énfasis en el contenido y no en la forma. Y ustedes mis no muchos y no muy exigentes lectores se merecen más, porque si somos honestos, no soy más que una mujer de 21 años que no tiene mucho que contar, todavía mi vida se ha llenado más de sueños que de experiencias, más de aventuras y torpezas, que desventuras, tropiezos y lecciones. Si yo tuviera experiencia o algo interesante que contar, no sería si no lo que vivo a través de los ojos de otros. Y con todo gusto lo haría, el caso es que hoy por hoy no conozco ninguna de esas historias tan afondo como para ser fiel no solo al contenido si no al sentido de la misma, y no soy una persona superdotada, erudita, sabia, filosófica que haya encontrado alguna verdad absoluta respecto a nada, así que lo que escribo más allá de ser interesante, tiene la única capacidad y cualidad de poder ser bonito. Me tomaré un breve espacio para recapitular en mis notas, darle forma a los escritos publicados, darle forma a los que no, y a los que aún no he escrito hacerlo con alguna estructura, muchas gracias de verdad, y me atrevo a decir Gracias Mamá, Gracias Abuela, que son las únicas que estoy cien por ciento seguras de que me leen.

Y gracias también a mi mentora, que me recordó que mi talento era realmente la estructura, y habría que explotarlo y dominarlo, ahora si que pulir el diamante antes de incursionar en la perfección de otro arte, probablemente ni cuenta se haya dado del "tip" tan grande que me dio.

Elena Iduñate Barrera

miércoles, 17 de marzo de 2010

Me da envidia saber que tu si

Hace mucho que no escribo y me da envidia ver que tu si

Hace tiempo que no se que contar y me muero de rabia al ver que tu si

Se me ha olvidado como decir te amo

Quizá nunca aprendí

Me muero de celos al verte lejano y ver que tu día sigue sin mi

No recuerdo si fui yo, fuiste tu o como fue que comenzó

Y de mi puño y letra te escribo que deseo que brille en mi casa el sol

Me despierto a lo lejos de un ensueño, en los absurdos límites de mi vanidad

Sujeta a caprichos y desvelos, a una atrofiada creatividad que no me deja respirar

Y quizá nunca lo hice

Tal ves yo nunca supe escribir, las historias de ataño que un día conté

Se las robe al aire, las tome de tu boca, las copié de los trazos de tu piel

Hoy por hoy quiero ser amada,

Reconocida como en tus brazos nunca fui, ensimismada en el más absurdo de mis retratos

Veo la caricatura que tu lograste hacer de mi

Hace mucho amigo que no escribo, y me da envidia ver que tu si

Yo se que ninguno de los dos ha amado, tu juegas a querer

Y o sueño que me quieren

Mas enfrentándonos a la realidad yo sigo siendo solo yo

Sólo yo en el ególatra rincón donde escondo mi ego

Y tú, sólo tu en la soberbia vicisitud de tu eterna necedad

Siento que nadie me escribe y que mis gritos se ahogan al aire

Confirmo que nadie me escucha y admito

Esta confesión me sofoca

Hazme mucho que no escribo y me da envidia

Saber que no tengo nada que contar

Creer que no ha habido nada nuevo que sentir

Saberme aburrida monótona apacible

Echando de menos los errores de antaño

Los momentos introspectivos en que todo era nada

Y en la nada reinaba la locura, la incoherencia, la pasión

Los arrebatos locos de la juventud

Que trajeron consigo relatos emociones,

La vida desobligada que me permitieron llevar

Los días de ocio, y de saciedad.

Hace mucho que no escribo y es que no tengo nada que narrar

Me da envidia saber que otros lo hace pues

Hace mucho que no escribo y me da envidia.

Me da envidia saber que tu si vives, y que vives a través de ti

De los sueños y deseos que se escriben, de las historias que no cuentas

Y que entre líneas atesoras solo para ti.

Yo solo fui

Y yo solo soy la que comparte el nombre con sus más grandes amores, la que de madrugada y a lo lejos vela sus sueños, sus medios, y recoge los restos que dejan las mujeres al pasar. Y al final solo soy su más fiel lectora, la más silenciosa de los escuchas, el alma a quien su labia no puede engañar. Y a lo lejos soy la más grande admiradora, el más benévolo juez, el café que noche a noche le acompaña mientras termina con un cigarro otro día más de líos de faldas. Y cuando llegue el invierno, y te traiga consigo, no habrá quien acompañe tus noches, quien comparta tus sábanas, y entonces, solo entonces regresaras al mismo sitio, donde nos topamos tantas noches y entre versos y palabras nos procuramos abrigos, tu alma sola a lejos, la mía sola junto a mi, y entre lo más absurdo de los recuerdos, seguimos estando tu y yo, solos y aquí. Amigos, no, yo lo veo casi como un hermano, de esos que escogió el alma sin siquiera haber avisado. No es que seamos parecidos, mucho menos somos polos opuestos, simplemente nos encontramos, nos conocimos, nos aceptamos, y nunca nos atrevismos a juzgarnos. El juega de una forma muy distinta de la mía, da pasos seguros, un tanto agigantados, mucho más vanidoso que soberbio, seduce y se deja seducir. Mi máscara sin embargo es muy distinta, mi soberbia mucho supera mi vanidad, mis pasos más que seguros, son siempre atrabancados y de corto trazo. El se mueve sigiloso, mientras cada movimiento mío parece ser brusco, estruendoso. Su delicadeza es casi tan sutil como exasperante mi torpeza, y sin embargo yo solo soy la que comparte el nombre con sus más grandes amores.

Escuchar mi voz

Reconozco que con los avances tecnológicos he podido mantenerme en contacto con mucha gente con la que había durado mucho tiempo sin interactuar. Tras atreverme a hacer semejante aseveración no puedo más que admitir el miedo que me provoca confiar en que mis relaciones se sostienen en gran parte a través de una computadora, un radio, o un teléfono celular. En un principio, cuando no había tantos programas y accesorios a la mano de todo tipo de público, el único tipo de relaciones que mantenía por estos medios de comunicación eran relaciones a distancia, con gente que vivía muy lejos de mi y que por el elevado costo que implicaba realizar un viaje, me era casi imposible seguir en contacto. Conforme ha ido avanzando el tiempo y con él ha crecido la ola tecnológica (que al parecer a llegado como una invasión) las relaciones que mantengo por estos medios, no son sólo aquellas en las que están involucradas personas que residen fuera de la ciudad, la mayor parte de mensajes, llamadas o correos que mando es a gente cercana a mi, amigos o familiares que se encuentran a unos cuantos minutos de mi. El tiempo en que he decidido alejarme un poco de este medio habría de haberme dado más tiempo para mi y quienes están cerca de mi, pero habiendo intentado hacerlo una gran mayoría esta ausente, me fue más fácil encontrarles por alguna red social y comunicarme con ellos, que recibir si quiera una respuesta a una llamada por teléfono que hacia. Cada vez hablamos menos, no solo en persona, sino hasta por teléfono y hay veces, en que necesito oír mi voz.

Más Palabras...

Los artistas, los pintores, los músicos, los escritores hacen un bosquejo antes de empezar alguna de sus obras, ya sea una lluvia de ideas o un breve esquema de lo que pudiera ser el "plot" de cualquier novela, una breve serie de rimas que concatenadas una con otras entonaran la más suave melodía; sonidos aunados unos con otros, y los otros con los unos, entonando la voz al unísono, notas, corcheas, bolas blancas y negras que emiten las voces de un pueblo, un hombre, una nación.

viernes, 29 de enero de 2010

Reencuentro

Mi querido amigo, te tenía olvidado

Hace mucho tiempo que no acudía a ti.

Confidente mío, no te había escrito

No logro entender como aguanto el alma

Tanto tiempo si dejarme ir.

Regreso y te leo, regreso y me escucho

En este reencuentro me veo, me sorprendo.

No estás hoy como estuviste antes

Ni tengo la confianza de contarte lo que ayer,

Sin mayor preámbulo hubiera hecho.

Hoy por hoy te siento ajeno, desconocido,

No parece que fuera yo quien tanto tiempo se adueño de ti.

Que las palabras que tu retratos plasman

Fueran alguna vez los pensamientos dueños de mí.



Con al ansiedad que aborda el alma

La desesperación de verte aquí

Sentirte tan lejos de mí

Creer que hoy no soy de ti

Me asusto, estoy a disgusto, en desconcierto.

Hace tanto que no te escribo

que hoy no se que decir, siento palpitar el corazón desorientado, acelerado, ansioso una vez más por regresar a ti, hablarte como lo hice antes, y ser yo a través de ti, que cada una de las palabras escritas, plasmen y narren mi vivir, mi pensar, mi sentir, mi existir.



Datos personales

Mi foto
Tierron/Tierrancho, Laguna, Coahuila, Mexico
Pues bien a mi me ha dado por escribir. Algunas veces me confiezo soñadora y llena de esperanzas, pero otras permito que escriba El Francotirador que es a quien le es más fácil hablar de este mundo en aquellas ocasiones en que la esperanza y la ilusión se pierden en mis manos. Entonces aparece Franco que siendo tan franco cae en lo pesimista, en lo realista. Espero les gusta la mancuerna que hacemos, saludos. A grandes razgos, no hace falta más que leerme un poco para conocerme bastante.